jueves, 31 de enero de 2013

Retrato idealizado (retrato de Simonetta Vespucci como una ninfa) - Sandro Botticelli



El 29 de enero de 1475 se libró un famoso torneo en la plaza de la Santa Croce en la ciudad de Florencia para celebrar el acuerdo de paz entre las tres potencias italianas de Venecia, Milán y Florencia. La justa, organizada por el señor de esta última, Lorenzo "El Magnífico", no pretendía ser un torneo a la usanza de los antiguos y cruentos torneos medievales sino una demostración colorista y festiva que demostrase, a la vista de todos los presentes, la destreza en el manejo de las armas y la suntuosidad de los miembros de la familia de los Médicis pues, a este torneo, concurría Giuliano de Médicis, el hermano menor de Lorenzo

Cuentan las crónicas de la época que el espectáculo fue de un esplendor y magnificencia nunca visto hasta la fecha. Los Médicis habían presionado a las familias nobles de Florencia para que participasen en este espectáculo encargándose ellos de pagar gran parte de los gastos de los equipos de armas y vestuario requeridos. Entre los elementos que debía tener cada uno de los caballeros que participaban en esta competición figuraba su estandarte que, de acuerdo con las antiguas costumbres medievales, llevaría representadas unas imágenes alusivas a la mujer elegida por el caballero, la mujer dueña de su corazón, y que debería corresponder a una mujer ya casada de la corte y que se destacara especialmente por sus virtudes. Estos estandartes fueron encargados a distintos maestros pintores de Florencia como Andrea del Verrocchio o Antonio Pollaiuolo pero Giuliano de Medícis encargó el suyo a un pintor llamado Alessandro Filipepi, más conocido como Sandro Botticelli

La imagen que Botticelli plasmaría en el estandarte de Giuliano a instancias de este, sería la de una bellísima dama conocida en la corte de los Médicis como Simonetta Vespucci, una mujer cuyo rostro se convertiría en un icono en la obra de Botticelli, rostro que, idealizado seguramente, podemos contemplar en el cuadro que hoy traemos aquí. 

Simonetta Cattaneo di Candia, fue una joven genovesa casada con Marco Vespucci, un rico comerciante perteneciente a una prestigiosa familia florentina aliada de los Médicis. Vecino de Botticelli, este matrimonio era muy conocido en toda Florencia principalmente por la belleza de Simonetta y por su fama de mujer fiel y enamorada de su marido Marco con el que se había casado con solo 16 años. Cuando Botticelli la plasma en el estandarte de Giuliano, ella tan solo tendría 21 o 22 años y moriría un año después, en 1476, víctima de la tuberculosis. 

Se ha escrito mucho sobre un posible amor secreto entre Giuliano de Médicis y Simonetta Vespucci y se ha contado que eran amantes, pero nada de esto se ha podido probar. El hecho de que ella fuera una mujer admirada y que Giuliano la escogiese como su favorita para figurar en su estandarte no significa nada pues, este tipo de representaciones formaban parte de un juego amoroso pero público y no solo no afectaba en absoluto a la reputación de la mujer sino que la exaltaba a ella y al caballero que la había elegido. 

De Simonetta Vespucci no hay prácticamente referencias biográficas y es Botticeli el que va representando su imagen años después de muerta en muchos de sus retratos de jóvenes damas, en sus madonas y en sus ninfas o Venus mitológicas y que constituyen lo mejor de su obra. 

La imagen de Simonetta no es un vivo retrato de la modelo - ella nunca posó para Botticelli -, es el ideal de mujer que se caracteriza por la belleza perfecta y virtuosidad igualmente perfecta. Botticelli nunca pretende reflejarnos las cosas - los seres - tal y como los vemos sino tal y como son en el mundo de los símbolos. 

El cuadro que hoy vemos fue pintado sobre 1480, cuatro años después de desaparecida Simonetta, y el Museo Städel, (Frankfurt), museo en el que se puede contemplar este cuadro, - atribuido según algunos expertos a Jacopo del Sellaio - le puso el largo titulo de "Retrato idealizado (retrato de Simonetta Vespucci como una ninfa)" (Weibliches Idealbildnis (Bildnis der Simonetta Vespucci als Nymphe)), seguramente para matizar que la imagen de Simonetta está idealizada, que es un ideal. Un icono. 

Simonetta, o el icono Simonetta, aparece aquí representada de perfil, pero no rígida sino con una cierta sensación de movilidad que produce su busto diagonalizado. Sus cabellos rubios, con largas trenzas y algo azotados por el viento serán los que nos vuelva a mostrar cuando Boticelli la represente en "La primavera", en "Venus y Marte" o en "El nacimiento de Venus" unos años después. El camafeo que luce al cuello es un colgante que pertenecía a los Medicis, grandes coleccionistas de este tipo de joyas, y que se conserva y ha sido expuesto en alguna ocasión. Este camafeo representa al dios Apolo y al sátiro Marsias, el sátiro que según la mitología griega desafiaría a Apolo en un concurso musical. En el tocado de plumas de garza y en el broche y las perlas que adornan la cabeza de Simonetta algunos han querido ver una alusión al apellido Vespucci (avispa). 

Simonetta fue llamada "La mujer más bella del Renacimiento". Yo pienso que su belleza es no solo del Renacimiento sino que es una belleza siempre actual, moderna. Botticelli descubrió tal vez el modelo ideal de belleza femenina. El actor, escritor y director de cine Peter Ustinov escribió en algún sitio que: "Si Botticelli viviera, trabajaría para Vogue."  

Más imágenes de Simonetta en este corto y agradable video.

35 comentarios:

  1. Gracias una vez mas por el viaje en el tiempo y la historia. Siempre un placer.

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    1. Gracias a ti por tus visitas y amables comentarios. Un cordial saludo

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  2. Thank you for showing this beautiful portrait of Simonetta by Botticelli - a Botticelli painting is so distinctive and recognisable. I enjoyed your background history to the painting of Simonetta too.

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    1. Thank you for your visit. I'm glad you enjoyed this little story. Greetings.

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  3. La amante de de Giuliano de Médicis y la musa de Botticelli, casi nada. Excelente retrato el que nos dejas. Buen fin de semana. Abrazos.

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    1. La verdad es que fueron la pareja de moda aunque por pocos años. Luego quedó el mito platónico. Buen fin de semana también para tí. Un abrazo.

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  4. Que interesante el retrato de Simonetta que no fue de un vivo retrato de la modelo, sino el ideal de mujer que Botticelli había imaginado y representado. Una gran belleza la joven Simonetta.
    Un abrazo y buen post

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    1. La verdad es que debió ser una mujer bella a juzgar por los retratos que le hizo no solo Botticelli sino otros pintores de la época como Piero di Cosimo. Un abrazo y un buen fin de semana sin nevadas.

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  5. Se que me repito, pero que magnifica entrada.Leerte es como abrir los ojos y ser capaz de ver lo que antes sólo eras capaz de mirar.
    Un saludo

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    1. Muy amable tu comentario. Creo que me lees con buenos ojos lo cual siempre es de agradecer. Un saludo y gracias por tus visitas.

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  6. Puede valer como sinónimo "idealismo" por "amor a Simonetta".
    Un saludo

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    1. La verdad es que tienes razón pues cuando uno se enamora, se idealiza la persona amada. Botticelli debía estar enamorado - platónicamente - de Simonetta para plasmar su rostro en decenas de cuadros.

      Un cordial saludo.

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  7. El retrato de Simonetta se podría considerar como una representación, una abstracción, de la belleza femenina ideal y, por tanto, atemporal. Por eso nunca pasa de moda. Boticelli bien pudiera haber trabajado para Vogue si hubiese vivido hoy día y Simonetta podría haber sido modelo de pasarela o actriz de cine.
    En todo caso, representa el ideal platónico de la belleza, espiritual y sensible, a la vez que mitológico y humano. Por ello encontramos a Simonetta y su rostro idealizado en las ninfas de los bosques, en el panteón de los dioses, como personificación de la Flora o de la mismísima Venus. Giuliano pudiera haber estado enamorado de esta joven diosa de la belleza y no menos lo estaría el propio Boticelli, siempre perseguido por este rostro amado platónicamente más allá de la muerte.
    Un saludo

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    1. Si que podría haber sido una actriz de cine. Yo la encuentro un gran parecido con Uma Thurman.

      El movimiento neoplatónico que surge en Florencia es el que genera estas bellezas idealizadas. Creo que sí, que Botticelli debió estar muy enamorado platonicamente de esta mujer pues hasta en su muerte pidió ser enterrado en la misma Iglesia que ella.

      Un cordial saludo.

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  8. Qué maravilla de artículos. No había caído nunca en la cuenta que el rostro de Simonetta era también el del Nacimiento de la Primavera. Un saludo.

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    1. Bueno, la verdad es que casi todos los rostros femeninos pintados por Botticelli tienen unos rasgos parecidos o similares. La verdad es que uno observa "El nacimiento de la primavera" y las seis mujeres que componen el grupo central parecen hermanas.

      Gracias por tus amables comentarios. Un cordial saludo.

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  9. Botticelli es uno de los pintores que más me gustan. Es Florencia. Y Florencia es Botticelli, por muchos recuerdos personales. Ese ideal de mujer que siempre retratara Botticeli, creo que es mucho más bella por que carece de muchos artificios, que no se ajusta a cánones, es decir, que es perfectamente natural y posible, es lo que le da esa belleza que no se limita a lo físico, sino que trasciende en virtudes que se dejan ver muy fácilmente, con toda sencillez.
    Apasionante historia, me gustó mucho, como siempre.
    un fuerte abrazo, Presley

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    1. Tuvo que ser en Florencia donde Stendhal presentase su famoso sindrome al ver tanta belleza en la Santa Croce.

      Tienes razón. Solo hay belleza física si esta va unida a la belleza interior.

      Gracias por tus visitas y comentarios. Un fuerte abrazo también a tí.

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  10. .
    Es en "Un amor de Swann" donde Marcel Proust, cuando describe a la cocotte Odette de Crécy, la compara sin nombrarla con esta Simonetta.
    (Gracias por el blog).
    :-)

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    1. Interesante tu comentario. Debo volver a releer esta parte de la obra de Proust. Si sé que Proust pensaba que la única salvación, la única redención, se encontraban en el arte.

      Gracias a ti por tu comentario y perdona mi tardanza en responderte. Yo también estoy siempre en busca del tiempo perdido pero creo que nunca lo encuentro. Un abrazo.

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  11. Qué maestría la de Botticelli! Espectacular.

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    1. Si que era un gran maestro. Gracias por pasar por aquí. Un abrazo.

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  12. Siempre bella, siempre actual, que maravillosa entrada, datos muy valiosos nos aportas y Botticcelli, un grande, grande, grande!
    Abrazos.

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    1. Me alegro que te haya gustado. Por lo que veo has vuelto ya de tus vacaciones veraniegas. Pronto te visito. Un abrazo.

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  13. Un placer enorme leerte Presley. Ella era preciosa. A mi me gusta especialmente en Giuditta con la cabeza de Holofernes en la mano.
    Como siempre mil gracias.

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    1. Creo que es un poco más sangriento aunque el díptico de la decapitación de Holofernes es un cuadro magistral. Mil gracias a tí, Gloria, por tus visitas. Un abrazo.

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  14. Si, es cierto, la gran belleza de esta mujer y del cuadro, creo que el atractivo de Simonetta, es porque su belleza es atemporal, quizás ese sea su mayor enganche,y las manos prodigiosas del pintor Botticelli.
    Que buena historia y que bien contada,amigo

    Besos desde el Tópico

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